¡Buenas, buenas, queridos lectores! ¿Cómo están?
¡Yo, por fin, he vuelto! No sé si lo habrán notado, pero hace un poquito más de un mes que no publicaba nada en el blog, y eso se debe principalmente a una enorme razón: como pueden leer en el título de la entrada, ¡me fui de viaje a Disney!
Soñé por casi 15 años con la posibilidad de realizar este mágico viaje, y este año, finalmente, el sueño se volvió realidad. Después de un arduo trabajo intentando convencer a mi madre acerca de viajar al exterior las dos solas, y sobre todo después de mucho sacrificio ahorrando (no saben lo que me costó dejar de comprar libros, de verdad), el 25 de septiembre ambas estábamos en un vuelo Buenos Aires - Lima, con destino final Miami.
El primer efecto se notó en mis lecturas. No sé si alguno se habrá dado cuenta —porque en realidad no estuve publicando en absoluto—, pero no hubo, ni habrá, Wrap Up de septiembre (al menos no de forma independiente). El mes pasado, entre el stress de los preparativos, sufrir con las trayectorias y las posibles consecuencias de la temporada de huracanes, y lidiar los nervios, solo pude leer 1 libro y medio. Hacía años que no leía tan poco, pero desde que me confirmaron la fecha del viaje, sabía que eso iba a suceder.
De hecho, esperaba que el "bloqueo" se extendiera a octubre, por la "resaca post viaje", pero gracias a los dioses literarios, estoy leyendo bastante. Lo mismo sucedió con el blog. Aunque en septiembre de alguna manera me las terminé ingeniando para traerles algunas entradas, lo cierto es que no fueron tan regulares como acostumbro intentar que sean, y finalmente en octubre llegué a la sequía total.
De hecho, esperaba que el "bloqueo" se extendiera a octubre, por la "resaca post viaje", pero gracias a los dioses literarios, estoy leyendo bastante. Lo mismo sucedió con el blog. Aunque en septiembre de alguna manera me las terminé ingeniando para traerles algunas entradas, lo cierto es que no fueron tan regulares como acostumbro intentar que sean, y finalmente en octubre llegué a la sequía total.
Pero bueno, ya habrá tiempo para hablar de libros, y para que ustedes vean como de a poquito pretendo ir reflotando este pequeño espacio. Mi idea para esta entrada en realidad es contarles un poquito sobre mi experiencia en las Tierras Mágicas del Ratón, así que si tienen ganas de saber cómo me fue en mi viaje, los invito a seguir leyendo.
EL HOTEL
Llegamos a Orlando, específicamente al hotel All Star Music dentro de Walt Disney World, muy tarde la noche del 25 de septiembre, tras un viaje en bus de 4 horas de Miami a Orlando.
No les miento, desde el momento en el que traspasas las puertas del lobby del hotel es como entrar en un mundo paralelo donde todo el mundo es amable, todo el mundo sonríe, y no importa lo que pase, siempre están dispuestos a ayudarte. Cada persona con la que hablo me dice "les pagan para eso", y ya sé. No crean que no lo sé. Pero es imposible no sentirse contenido e inmediatamente feliz tras el primer saludo. Por eso, si están planeando su viaje, y es la primera vez que van (o nunca antes se hospedaron dentro de Disney), y si sus presupuestos les permiten pagar un poquito más que si se tuvieran que hospedar afuera, mi consejo es que no duden en elegir hacerlo en alguno de los hoteles de Disney. Leí a muchos decir "hospedándote adentro, la magia nunca termina", y es la pura verdad.
Nuestro hotel (y creo que también los otros dos en la cadena "All Star"), además de un edificio enorme donde se encuentran el lobby, el comedor, una sala de juegos, y un shop con recuerdos y cosas útiles, está divido en 10 edificios con —no quiero mentirles, pero estoy casi segura de que es así— al rededor de 100 habitaciones cada uno. El hotel es temático, y como bien dice su nombre, está dedicado a la música (a nosotras nos tocó el ambientado en la música country). Las habitaciones standar son bastante "normalitas" pero tienen lo esencial, y las camas de una plaza y media, tirando a dos, son lo mejor de la vida. También cuenta con dos piletas al aire libre y dos edificios de lavandería donde cada quien llena su lavarropa, exactamente como en las películas.
La verdad es que por haber llegado tan tarde el primer día, y por no contar con mucho tiempo libre después, no tengo muchas fotos del hotel, y las que tengo son malísimas. Pero si les interesa, no dejen de buscar fotos en Google, porque es una preciosidad.
Otra cosa genial de hospedarse dentro de Disney es que los traslados a los parques son gratis. Uno se para en la filita que corresponde al parque al que quiere ir, y en unos pocos minutos va a tener un colectivo que te lleva sin tener que pagar nada. Y lo mismo de regreso, en los andenes correspondientes a cada hotel, que se encuentran fuera de los parques. Si van sin alquilar auto, como nosotras, es un verdadero salva vidas, y solamente les resta preocuparse por alquilar un transporte, si es que van a los parques de Universal. De hecho, si sus vuelos llegan y salen desde el aeropuerto de Orlando, Disney también los trae y lleva gratis hasta allí.
LOS PARQUES
El primer día fuimos a Epcot. Mientras planificaba el viaje, vi muchísimos comentarios acerca de este parque, que lo calificaban como "el más aburrido". Como era mi primera visita, y realmente quería ver las cosas con mis propios ojos, opté por no dejar ningún parque afuera (de los de Disney, al menos), y la verdad es que no me arrepiento.
Epcot es especial a su manera, y a pesar del calor infartante, lo disfruté muchísimo. El parque se divide en dos partes: Future World, donde se pueden encontrar los juegos y algunos shows, y World Showcase, donde se pueden recorrer réplicas de distintas ciudades emblemáticas del mundo.
Si bien es cierto que no tiene tantos juegos, o al menos no juegos tan "memorables", Epcot cuenta con una de mis atracciones favoritas en todo el viaje.
Disclaimer que sirve para toda la entrada: en primer lugar, la idea de subirme a una montaña rusa nunca me resultó atractiva, de hecho la consideraba terrorífica (ya van a ver más adelante por qué digo "la idea"), lo mismo que los juegos con movimientos bruscos —porque piensen que yo hasta me mareo en el auto—. Es por eso que evité subirme a algunas atracciones, y es probable que si a ustedes le gustan ese tipo de cosas, consideren que hay atracciones mucho mejores que las que yo voy a mencionar. En segundo lugar, jamás hice nada ni remotamente parecido a la realidad virtual, o los simuladores 4D, por lo que toda esa tecnología fue algo completamente nuevo e impresionante para mí. Quizás algunos de ustedes, los que ya hayan pasado por esa experiencia, no crean que es algo tan maravilloso y digno de mencionar, pero para mí sí lo fue.
Aclarado esto, como les dije, Epcot tiene una de mis atracciones favoritas, y estoy hablando nada más ni nada menos que de Soarin', un simulador de ala delta, que te lleva sobrevolando por las ciudades y paisajes naturales más icónicos del Planeta Tierra. Es realmente increíble, casi que no tengo palabras para describirlo, y es demasiado corto para el bien de todos. Fue bajarse y querer subir de nuevo automáticamente, pero por desgracia es uno de los juegos con mayor espera en Epcot. Por algo será, ¿no?
Pasando a lo que es el World Showcase la verdad es que me encantó cómo están representadas las diferentes culturas, y hay un montón de lugares hermosos para sacarse fotos, además de la posibilidad de encontrarte en cada ciudad con un personaje para traerte un lindo recuerdito. Mis favoritas sin duda fueron Elsa y Anna de Frozen en Noruega, porque son unas divinas ❤
(En el monumento representativo de Epcot)
Pasando al segundo día, nos tocó visitar Magic Kingdom. Cualquier persona que conozca al menos un poquiiiiito de Disney sabe que Magic Kingdom ES Disney. Toda la magia y las emociones que un fan de Disney puede tener al pensar en visitar los parques de Orlando se encuentra en este parque en particular.
Magic es ENORME (se divide en 6 sectores), y aunque le pusimos toda la onda, no pudimos recorrerlo en su totalidad (más razones para volver, obviamente).
De todas formas, para abarcar un poquito más del parque, aunque sea visualmente hablando, hicimos uso del Liberty Belle Riverboat, que es un barco impulsado por una rueda de paletas, que recorre toda una costa del parque, saliendo desde el sector Liberty Square y pasando por los sectores de Adventureland y Frontierland. En estos dos sectores, al igual que en Futureland, hay juegos más fuertes y montañas rusas, por lo que tampoco sentimos que nos estábamos perdiendo de mucho. Pero si vuelvo, obviamente pienso ir.
Lo que realmente recorrimos en su totalidad fueron los sectores de:
- Main Street USA, que recrea una calle principal con construcciones reales típicas del siglo XIX; cada una de ellas es un shop, y es imposible evitar detenerse en cada detalle de los edificios, o entrar y querer comprarse todo. Al final de esta calle principal se encuentra el icónico Castillo de la Cenicienta, lugar donde se realiza Happily Ever After, que es el show de cierre y una de las cosas más maravillosas que vi en mi vida. Imperdible y emocionante hasta las lágrimas.
- Liberty Square, donde se recrea Estados Unidos en la época de la Guerra de la Revolución, con una réplica de la Campana de la Libertad, la estación del Liberty Belle Riverboat, que le da a todo una vibra muy colonial, y uno de las atracciones que más me gustó en el parque: The Haunted Mansion, una suerte de tren fantasma con unos efectos de verdad impresionantes. Además, Liberty Square es una de las mejores ubicaciones (y donde nosotras nos acomodamos) para ver el desfile de carrozas, que también es para dejarte con la boca abierta.
- Fantasyland: Es EL sector de Magic Kingdom. Tiene un montonazo de juegos (algunos más tranquilos e infantiles, pero igual de mágicos) y lugares para comer/comprar cosas. La magia ahí se respira, y tiene lugares específicos para sacarse fotos con los personajes clásicos de Disney: las princesas, Gastón y Peter Pan, por nombrar algunos.
Y acá hago un pequeño paréntesis para contarles una anécdota divertida. En Fantasyland fue donde me subí a mi primer montaña rusa EVER. Pero, ¿cómo? —dirán ustedes— ¿no es que no les gustaban las montañas rusas? Bueno, lo que pasó fue lo siguiente. Armando el viaje, muchas personas me recomendaron la atracción Seven Dwarf Mine Train, como que era imperdible y necesario sacar FastPass porque su demanda es muy alta (los FastPass son una forma de no hacer cola en las atracciones, y Disney te da hasta 3 por cada día de parque).
Cuando con mi madre revisamos las descripciones de cada juego, por algún extraño motivo obviamos la parte que decía "Mezcla de montaña rusa infantil..." y nos quedamos con la idea de que era un paseo en trencito minero, y muy pero muy recomendado. Obviamente, saqué el FastPass correspondiente, y cuando nos subimos nos encontramos con que era mitad paseo tranquilo en trencito y mitad montaña rusa (aunque gracias al cielo no tiene las volteretas raras que me impresionan).
Es el día de hoy que mi mamá me sigue odiando por haberla arrastrado a esa atracción, pero PLOT TWIST a mí ¡me encantó! ❤ Se convirtió en uno de mis juegos favoritos, y me sembró la duda de que tal vez puedo disfrutar de una montaña rusa un poco más "osada" (acá es donde se explica que "la idea" de subirme a una montaña rusa me aterrorizaba). Quizás en un próximo viaje, acompañada de alguien que no sea mi mamá, me arriesgue.
(Frente al Castillo de la Cenicienta)
El tercer día fuimos a Animal Kingdom, un parque que me gustó muchísimo, sobre todo porque está lleno de vegetación y la verdad es que el calor se nos hizo mucho más soportable. También está dividido en sectores, y tampoco pudimos recorrerlos todos, esta vez no por falta de tiempo, sino por una situación en especial que ya les voy a contar.
Primero fuimos al sector de África, que está excelentemente ambientado. Hicimos el Kilimanjaro Safaris, que como su nombre lo indica es nada más ni nada menos que un Safari donde se pueden apreciar de los animales que se encuentran en la reserva de Animal Kingdom. También disfrutamos de The Festival of The Lion King, que es un show impresionante con un montón de actores (cantantes, bailarines y acróbatas) en escena, y unas carrozas con detalles que sorprenden.
Después de ver el show, no tuvimos mejor idea que cruzarnos al sector de Pandora, un sector nuevo en Animal Kingdom, completamente ambientado en la película Avatar. Y acá viene la explicación de por qué nos quedamos sin tiempo (y fuerzas).
Mientras organizaba el viaje, había descartado el sector de Avatar, primero y principal porque creía que era imperativo haber visto la película para disfrutarlo, y además porque uno de los dos juegos que tiene el sector es un simulador, y sinceramente no sabía cómo iba a comportarse mi sensibilidad al movimiento.
Para colmo, había visto un video en youtube y algo me dijo: "No, Melisa, no te lo vas a bancar". Con el pasar de los días, veía cada vez más y más comentarios acerca de lo genial que era Flight of Passage, y de cómo era "el mejor simulador de Disney". Aún así, cabeza dura como soy, ignoré la posibilidad de sacar FastPass, inclusive teniendo en cuenta que las esperas en algunos casos llegaban a las 3 horas.
Para colmo, había visto un video en youtube y algo me dijo: "No, Melisa, no te lo vas a bancar". Con el pasar de los días, veía cada vez más y más comentarios acerca de lo genial que era Flight of Passage, y de cómo era "el mejor simulador de Disney". Aún así, cabeza dura como soy, ignoré la posibilidad de sacar FastPass, inclusive teniendo en cuenta que las esperas en algunos casos llegaban a las 3 horas.
Una vez en Disney, y habiendo pasado por Soarin' (simulador) y Seven Dwarf Mine Train (montaña rusa), se me ocurrió que podía animarme a hacer el simulador de Avatar. La espera en el momento que llegamos a la cola era de 2 horas, y dijimos "Bueno, ya fue. Lo hacemos". El problema se presentó cuando ya estábamos a la mitad de la cola y anunciaron que una de las salas de simulación se había descompuesto, por lo que la espera iba a ser más de lo estipulado. Terminamos haciendo 4 horas de cola —LITERAL—, pero ¿saben qué? LO VALE TOTALMENTE. La gente no exagera cuando dice que Flight of Passage es el mejor simulador de Disney. No encuentro palabras para expresarles ese nivel de tecnología, pero es de verdad increíble. Si van a Animal Kingdom, no se lo pueden perder. En serio.
Obviamente, después de tanto tiempo paradas esperando, terminamos decidiendo volver al hotel sin seguir recorriendo. Nos quedó medio parque sin ver, pero salimos felices. Ahora espero volver para conocer el resto. Y, por supuesto, volver a hacer Avatar, pero esta vez sacando FastPass.
(En la entrada de Animal Kingdom)
En el cuarto día recorrimos los dos parques más famosos de Universal: Islands of Adventure y Universal Studios. En realidad, nuestros planes consistían en recorrer un día cada uno, pero considerando que no nos gustan las montañas rusas, y que estos parques están llenos de ellas (y de las fuertes), decidimos hacer solo las cosas que nos interesaban, es decir, The Wizarding World of Harry Potter, y descansar al día siguiente (nos quedamos en el hotel y aprovechamos la pileta).
Antes de pasar a lo que a ustedes y a mí nos interesa como lectores, hicimos una pequeña parada en la atracción Race Through New York Starring Jimmy Fallon, en Universal Studios, un simulador que me habían recomendado muchísimo, y que la verdad es súper genial, además de que Jimmy es un ge-nio.
Empezando por este parque, lo primero que vemos relacionado con Harry Potter es King's Cross. Me saqué fotos afuera, pero no quise entrar porque sabía que después iba a tener que hacerlo para tomar el Expreso de Hogwarts, que me iba a llevar a la otra parte del WW, que se encuentra en Islands of Adventure.
Antes de entrar a lo que es el Callejón Diagon, nos encontramos con una réplica de Picadilly Circus en Londres, y un poquito más allá, algunos edificios de Grimmauld Place. En una plazoleta está estacionado el Autobús Noctámbulo, Stanley y cabeza parlanchina (que no es que dice frases pre-gravadas, sino que literalmente INTERACTÚA con vos) incluidos.
La réplica del Callejón Diagon es impresionante. Desde Gringotts (con dragón escupe fuego real y todo), pasando por Olivanders, Sortilegios Weasley, y hasta El Caldero Chorreante; todo es exactamente igual. Es inevitable no emocionarse. Además, en Olivanders pueden comprarse varitas interactivas que sirven para poder hacer magia en diferentes puntos estratégicos del WW.
De este lado del parque se encuentra la atracción Harry Potter & The Escape From Gringotts, que es un simulador que mi madre no se animó a hacer porque dicen que marea bastante, pero la verdad es que no haber ido sola es mi mayor arrepentimiento en este viaje, porque realmente suena GENIAL, y todo el mundo dice que es LO MEJOR. Voy a volver, y LO VOY A HACER, como que me llamo Melisa.
Después de recorrer, sacar fotos, hacer magia, y tomar un helado en Florean Fortescue, nos dirigimos a King's Cross para tomar el Expreso de Hogwarts. La estación es exactamente igual, y tiene un truco especial para que tus acompañantes, y las personas que vienen detrás tuyo, te vean traspasar la Plataforma 9 3/4.
(Esperando para ir a Hogwarts)
El tren es increíble y hay sorpresas que no les voy a contar, pero que me encantaron ❤. Una vez del lado de Islands of Adventure, nos encontramos con la réplica de Hogsmeade, con un clima muy invernal a pesar del calor agobiante.
Las Tres Escobas, Zonko's y Honeydukes dicen presente, y obviamente todo es muy igual. También hay como "otra sucursal" de Olivanders, donde se hace un pequeño show que recrea la escena en la que la varita elige a Harry, y yo tuve el placer de que me seleccionaran de entre el público para hacer la demostración. Así que me sentí bruja por un día ❤. Lamentablemente, ya había comprado mi varita en el Callejón Diagon, sino hubiese adquirido "la que me eligió", que después, hablando con una nena afuera, que también fue elegida por Olivander, me enteré que no siempre es la misma varita para todos.
De este lado del parque hay dos montañas rusas que, obviamente, no hicimos (aunque de nada me arrepiento más que de no hacer el simulador), pero la verdadera joyita es la réplica de Hogwarts. Imposible no querer desesperadamente sacarse una foto con el castillo de fondo.
(En Hogwarts)
El quinto día de parques fuimos a Disney's Hollywood Studios, que es un parque más chico y con muchas áreas en construcción, ambientado en la era de oro de Hollywood. Hay réplicas de cines, teatros, y hasta del Sunset Boulevard.
Tiene dos juegos súper populares: Rock 'n Roller Coaster starring Aerosmith y The Twillight Zone Tower of Terror. La primera es una montaña rusa, y la segunda es el típico juego en el que te sientan y subís verticalmente y bajás a toda velocidad, pero ambientado en una mansión embrujada y un ascensor fuera de control. No hicimos ninguna de las dos, por obvias razones, pero están consideradas como de las mejores atracciones de Disney, por lo que me pareció que debía mencionárselas.
Tiene dos juegos súper populares: Rock 'n Roller Coaster starring Aerosmith y The Twillight Zone Tower of Terror. La primera es una montaña rusa, y la segunda es el típico juego en el que te sientan y subís verticalmente y bajás a toda velocidad, pero ambientado en una mansión embrujada y un ascensor fuera de control. No hicimos ninguna de las dos, por obvias razones, pero están consideradas como de las mejores atracciones de Disney, por lo que me pareció que debía mencionárselas.
También hay mucho de Star Wars y Toy Story. No me maten, no vi Stars Wars, así que tampoco presté demasiada atención a esa parte, ni subí a la atracción especial, pero sí me saqué una foto con Woody y Buzz en Pixar Place porque Toy Story pasión ❤.
Una de las cosas que más me gustó de este parque, además de la ambientación, es que tiene muchos shows. Yo fui a 3 de los más importantes: Beauty & The Best. Live on Stage, For the First Time in Forever: A Frozen Sing-Along Celebration, y Fantasmic, el increíble show de cierre.
Mi favorito —quitando Fantasmic que TIENEN que verlo, porque es algo realmente impresionante que mezcla agua, luces, fuegos artificiales, y carrozas-barco— fue For the First Time in Forever: A Frozen Sing-Along Celebration porque 1) Frozen pasión ❤, 2) Unos cuenta cuentos súper simpáticos te cuentan la historia de una forma divertidísima, te hacen cantar, hay apariciones de los personajes, y tiene un final muy "congelado". Lo recontra recomiendo.
(En Sunset Boulevard)
El último día, haciendo tiempo entre que teníamos que dejar el hotel y que nos fueran a buscar, fuimos a Disney Springs, que es una especie de "parque" en el que no hay que pagar entrada, y básicamente está lleno de tiendas y lugares para comer.
No compramos casi nada, porque nos estábamos reservando para comprar ropa en Miami durante los tres días que pasamos allí después, pero tampoco queríamos despegarnos tan rápido de la magia de Disney.
(Sí, también fui a Miami, pero quitando el día de shopping con precios y variedades impensables, y esa sensación de querer comprarte todo, la verdad es que la ciudad no me convenció del todo. Encima nos tocó un clima horrible. Lluvia todos los días. Ni la playa pudimos pisar. Ya sé que la próxima vez, vamos a hacer solo Orlando, y aprovechar ahí los shoppings, que además el TAX —la versión norteamericana del IVA— es un punto más barato que en Miami).
(Último día en Disney Springs)
LO QUE ME COMPRÉ
Además de mucha ropa barata y hermosa en Miami, que no les voy a mostrar porque tardaría mil años y los aburriría, me traje algunos recuerdos de Disney-Universal. La cierto es que, al cambio dolar-peso, las cosas estaban bastante caras. Casi todo salía lo mismo, y casi nada bajaba de los 500 pesos. Si por mí hubiese sido, me habría comprado todo, pero tuve que ser muy selectiva. Esto es lo que terminé comprando:
- Un almohadón de Ravenclaw, porque #RavenclawPride. Me salió al rededor de 30 dolares, pero estaba entre eso y la bufanda o el gorrito, y me dije: ¿Qué voy a usar más tiempo? La respuesta llegó sola jajaja.
- Una varita interactiva (realmente no había diferencia de precio entre la interactiva y la no interactiva, así que no lo dudé mucho). Es la réplica de la de Hermione, porque es mi personaje favorito ❤
- Una tacita de Chip, simplemente porque es adorable, y ALGO "de lo más carito" de Disney me tenía que traer. Mirenla, ¿no es hermosa? ❤
- Una miniatura del Castillo de la Cenicienta, porque es el ícono de Disney por excelencia, y porque AMO a la Cenicienta ❤.
- Una cadenita con la M de mi nombre y un pequeño dije de strass con la forma de la cabeza de Mickey.
Además, como se imaginarán, no podía ir a USA y no comprarme un libro. Así que aproveché que el destino hizo que mi viaje coincidiera con la salida del nuevo libro de Colleen Hoover, y acá está. Ya lo leí, y sabrán mi opinión en el próximo Wrap Up.
Y eso fue todo. Espero no haberlos aburrido y que les haya gustado. De verdad fue un sueño hecho realidad para mí, y ya no veo la hora de volver.
¿Ustedes quieren ir? ¿Qué es lo que más les gustaría ver? Y si ya fueron, ¡cuénteme sus experiencias!
Nos estamos leyendo.-
Voy a comentar porque soy la mas capa de todas y me emocioné leyendo todo el relato... ya me dan ganas de ir jajaja me alegro muy muy mucho por vos, porque es el viaje que habías deseado con toda tu alma.. el próximo nos vamos a Edimburgo a cazar escoceses para vos jajaja
ResponderEliminarHola Meli! yo también me emocioné leyendo todo. Te re merecias este viaje por todo lo que lo preparaste y ansiaste ♥ Me alegro un montón! Ameeee el almohadon #Ravenclawpride y todo lo que contaste dnjkdnk. Había visto un video de Pandora y se veia demasiado genial. Quiero ir algún día sin duda.
ResponderEliminarBesooo
Hola Mel, siempre he querido ir a Disney así que espero que se pueda pronto y que la espera no sea tan larga como la tuya, y en caso de que lo sea, que pase realmente.
ResponderEliminarSacaste fotos muy lindas y las atracciones y funciones de shows de los parques suenan impresionantes.
Me alegro mucho por ti.
Un abrazo enorme chica.
Nos leemos.
Hola Meli!
ResponderEliminarVengo a comentar esta entrada mucho tiempo despues de haberla visto publicada porque justo cuando viajaste a Disney yo estaba teniendo un temita con eso que te cuento brevemente.
Tambien tengo el sueño de conocer Disney hace mucho y en Abril, salió el tema con una compañera de trabajo y dijimos de hacerlo para Mayo 2018, empezamos a averiguar, pedimos presupuesto y todo pero pasaron tres cosas que cambiaron los planes, primero me enteré que la VISA se tramitaba si o si en Buenos Aires y yo estaba viajando para alla para la feria del libro pero ya no tenia tiempo de sacar el turno y no tenía planes (ni permiso en el trabajo) para volver a viajar durante el año y todos decian que no conviene reservar ni pagar sin tener asegurada la visa, primer problema. Segundo problema, me salió un auto Okm que estaba pagando en cuotas, pero para que me lo dieran tenía que pagar un fangote de plata más tooooodos los gastos del hecho de tener auto y mis ahorros se esfumaron. Tercer problema, mi compañera de trabajo dejó de trabajar ahí y nos dejamos de ver. Si bien era el punto menos insalvable, ya no era lo mismo.
Así que te imaginaras que la decepci´n me hizo que no quería saber nada de Disney ni ver nada ni saber nada. Así que no pude pasar por acá porque no iba a tener nada para compentarte más que mis frustraciones.
Peero, los ultimos días de diciembre volví a pensar en el tema y en las ganas que tengo de hacer realidad este sueño y decidí que voy a ir, en algun momento -2019 ojalá-. Así sea sola. Ya no me importa. Así que ahora puedo volver y comentarte.
¡¡¡¡Que lindo todo lo que viviste!!! No tengo dudas de que debe ser una experiencia inolvidable para toda la vida y me alegra mucho que hayas podido cumplir un sueño que tanto anhelabas, nos devuelve un poco la fe en la vida.
Casí no sabía nada de lo que constas de los aprques de Universal porque nunca he querido mirar demasiado para no generar una ansiedad extrema. Pero no puedo ni imaginar lo hermoso de ver esas cosas que nos han acompañado toda nuestra vida ahí en vivo.
Y los recuerdos que trajiste son lo más. mi favorito sin dudas es el almohadon de Ravenclaw <3
Espero que por más que uno regrese con depresión post-Disney estos recuerdos te traigan siempre una sonrisa en los momentos dificiles y puedas volver a ir nuevamente para seguir disfrutando de la magia de Disney.
Un beso enorme. Y perdón el testamento.