Autor: Claire McFall
Editorial: Puck | Urano
Sinopsis: Dylan ha escapado ilesa de un horrible accidente ferroviario.
Pero, en realidad, no es así.
El paisaje sombrío que la rodea no es Escocia. Es un páramo donde merodean espectros en busca de almas humanas.
Y el extraño que está esperándola no es un chico común y corriente. Tristan es un barquero, cuya tarea consiste en transportar su alma al más allá, un viaje que ya ha hecho miles de veces.
Pero esta vez hay algo diferente.
Indecisa entre el amor y el destino, Dylan comprende que no puede separarse de Tristan, pero tampoco puede quedarse con él. Tarde o temprano, inevitablemente, los espectros capturarían su alma y ella se perdería para siempre.
¿Podrá el verdadero amor vencer los límites de la muerte?
¡Muchas gracias a Puck por el ejemplar!
RESEÑA
Cuando Dylan se embarca en un viaje en tren hacia el norte de Escocia para
reunirse con su padre —a quien no ha visto desde que tenía cinco años—
ciertamente no espera lo que está a punto de suceder. En un abrir y cerrar
de ojos, el vagón se encuentra a oscuras, y ella parece ser la única
sobreviviente de un terrible accidente.
Pero cuando logra salir del tren, y del túnel en el que este se detuvo, la sorprende encontrar a un chico que no recuerda haber visto antes, y que le asegura saber exactamente hacia dónde tienen que dirigirse.
Tras caminar durante horas en
dirección contraria al accidente, Dylan descubre toda la verdad. No está
realmente en Escocia, y ni siquiera dentro de su propio cuerpo. Ha fallecido en
aquel viaje frustrado, y Tristan es el barquero de almas encargado de
acompañarla hacia el más allá.
En un camino largo y lleno de peligros, Dylan y Tristan entablarán una relación especial que, incluso cuando ambos saben que al final tendrán que separarse, cambiará sus mundos para siempre.
“Ella era un alma que valía la pena proteger. Un alma que merecía que
le importara. Un alma a la que quería entregarle un trocito de sí mismo.”
El barquero de almas fue —para mí— la tercera novela en lo que va del año que lamentablemente se convirtió en víctima de sus propias buenas críticas. Y esto no significa que el libro no me haya gustado, sino que debido a los comentarios que había leído y escuchado al respecto desde su publicación en España, simplemente esperaba otra cosa.
Después de mucho pensarlo, llegué a la conclusión de que mi principal problema con esta novela estuvo en el hecho de que no llegué a conectar nunca con los personajes.
La historia comienza con un hecho traumático, y se sostiene con el viaje que la protagonista debe emprender, no solamente enfrentándose a peligros impensados, sino también realizando una especie de viaje espiritual, que la ayuda a entender y aceptar su situación.
Siento que la autora se centró muchísimo en los obstáculos del camino, y en todo lo que tiene que ver con las reglas del universo que está planteando, pero le faltó detenerse en los sentimientos de Dylan. Sus reacciones a todo lo que está atravesando son bastante poco creíbles, y desde ese primer momento en el que ella confirma que en realidad está muerta, se me hizo muy difícil creerle cualquier otro tipo de emoción: ya sea miedo, compasión, o incluso amor.
La verdad es que quedé un poco decepcionada. Esperaba que la historia me encantara, al igual que suelen conquistarme los libros que se centran en algún tipo de viaje, pero también descubrí que lo que muchas veces hace que ese tipo de historias me entretengan y se queden en mi corazón, no es el viaje en sí mismo sino sus protagonistas.
Independientemente de esto, la escritura de la autora es muy buena. Tiene escenas que te hacen pensar sobre la vida después de la muerte, y algunas otras que te ponen la piel de gallina. Además, es evidente que a otros lectores —a los que no les pase lo mismo que a mí— puede llegar a parecerles una lectura muy entretenida, y es probable que hasta lo lean en una sola sentada.
Sobre el final, la trama da un giro de ciento ochenta grados, y fue ahí donde la historia supo captar mi atención. Tomó la dirección contraria a la que pensé que iba a tomar, sorprendiéndome por completo, y dejando planteado algo que me parece muy interesante y que ojalá tenga un buen desarrollo en el siguiente libro.
En resumen, a pesar de que yo no logré conectar con los personajes, El barquero de almas es un libro que les puede llegar a gustar mucho si son fanáticos de la fantasía con un toque paranormal, de los viajes con grandes aventuras, y de los romances casi prohibidos.
Yo le di 3,5 plumitas, y espero que el próximo libro me sepa quitar el aliento.
SOBRE LA AUTORA
Claire McFall vive y trabaja en Escocia. El barquero de almas, su primer libro y comienzo de una trilogía, es una historia de amor que reinventa el mito griego de Caronte, el barquero de Hades, que transportaba las almas al infierno.La novela ha sido traducida a más de quince idiomas, ha vendido más de tres millones de ejemplares en todo el mundo y los derechos cinematográficos fueron adquiridos por Legendary Entertainment.
Hola!!
ResponderEliminarYa he visto este libro varias veces por aquí y la premisa me gusta bastante, soy muy fan de género pero de momento lo tengo aparcado porque tengo demasiados pendientes y no me quiero meter con más sagas jejeej
Gracias por tu reseña :)
besotes